En el caso de los alimentos, la inflación más fuerte es resultado de la devaluación del real, el aumento del precio de las materias primas y la rápida recuperación de la demanda en respuesta a los programas adoptados por el gobierno – entre ellos la ayuda de emergencia -, dijo Campos Neto.
“Para asegurar que este choque sea temporal, necesitamos mantener la credibilidad de las políticas fiscales y monetarias. Esto es muy importante. Con el agravamiento de la pandemia, la incertidumbre fiscal se ha vuelto aún más preocupante. La inversión productiva se retrae, es necesario y urgente a la respuesta institucional”, dijo.
“Entendemos que es una parte central, y que el desafío fiscal es muy grande. Necesitamos una respuesta al nivel. Con respecto a la política monetaria, lo que podemos garantizar es que el Banco Central cumplirá las metas de inflación”, agregó.
Fuente: BymaData