La decisión se da a días de que venza- el 26 de marzo- el nuevo plazo de negociación para la reestructuración de la deuda que había estipulado la gobernación, en una seguidilla de prorrogas de fechas que suceden desde abril de 2020 sin alcanzar ningún acuerdo. Los bonistas ya habían demostrado su enojo ante la falta de un acuerdo.
“Desde abril [de 2020], la Provincia no ha hecho prácticamente ningún esfuerzo por entablar negociaciones de buena fe con el Grupo a fin de encontrar una solución mutuamente aceptable y consensuada, a pesar de varios intentos de entablar discusiones de parte del Grupo y sus asesores. En lugar de buscar una solución, los funcionarios provinciales han optado repetidamente por extender el plazo de aceptación de una oferta de reestructuración fallida y desconectada de la real capacidad financiera de la Provincia y que, por lo tanto, nunca ha logrado el apoyo de los bonistas”, indicó un comunicado difundido hoy.
Recientemente, la Provincia mantuvo conversaciones restringidas con uno de los acreedores principales, GoldenTree Asset Management, que también es miembro del Grupo. Notablemente, las autoridades de la Provincia rechazaron la petición de GoldenTree de que se invite a todo el Comité Directivo a participar en las discusiones, explicó el grupo en comunicado.
Con esto, se explicó que los términos de la reestructuración que la Provincia discutió con GoldenTree, y que se hicieron públicos el 21 de marzo, “fueron rechazados por GoldenTree y el Comité Directivo y permanecen muy alejados de los términos que los bonistas internacionales de la Provincia considerarían aceptables”.
En esa contexto, los bonistas recordaron que en los últimos meses, ocho provincias argentinas han resuelto los desafíos de la pandemia relacionados con la deuda a corto plazo “a través de diálogo de buena fe” con sus respectivos tenedores de bonos internacionales, un contraste marcado al actual curso de las autoridades de la Provincia.
Según explicó el analista especialista en deuda, Sebastian Maril, “la demanda presentada contra la PBA en una corte neoyorquina, representa a más de 20 fondos con tenencias por US$ 205 millones de los US$ 7.200 millones que la PBA tiene en circulación”. Los grandes acreedores aun no se han presentado, aclaró.