Los inversores siguen con atención a los últimos movimientos preelectorales del oficialismo para retener a parte de su electorado y levantar su imagen política, tras acusaciones cruzadas contra la oposición.
Los indicadores, como el descenso mensual de la inflación y la suba de las exportaciones, demuestran una tímida recuperación económica que sería clave para alcanzar un acuerdo acelerado con el Fondo Monetario Internacional (FMI) de cara a ahorrar depósitos que sirvan para la inversión pública.
“El equipo económico seguirá apelando a las mismas herramientas para reducir la inflación, aunque destacamos que estas no podrán mantenerse en el tiempo. Las distorsiones de precios relativos son considerables y su corrección (en especial en servicios) podrían presionar sobre los precios, así como también podrían hacerlo las revisiones salariales, especialmente si avanza la monetización del déficit”, señalan desde SBS Research.
Además, el Banco Central (BCRA) continúa vendiendo reservas para sostener el tipo de cambio y evitar cualquier corrida o tensión cambiaria ante todo tipo de resultado electoral.
“El Banco Central vende U$S 500 millones por semana, los nuevos cepos bajaron considerablemente el volumen en los bonos que se utilizan para comprar dólar MEP y eso hace que el gobierno malgaste menos bonos y dólares para contenerlos. Está claro que el mercado busca el refugio del dólar, mercadería o activos en general antes de las elecciones”, añade el economista Salvador Di Stéfano.
El riesgo país medido por el JP cae 0,33% con 1.482 puntos. El índice recupera la tendencia a la baja y vuelve a los números de junio, favorecido por la agenda electoral.