Entre las mejoras que se realizarán en las plantas de los tres países se encuentra la reducción de emisiones, manejo de efluentes y gestión de materiales, especialmente en las plantas de Nuevo León, en México, San Nicolás de los Arroyos, en Argentina y Santa Cruz, en Brasil.
En un comunicado, Ternium explicó días atrás la adopción de una ruta de descarbonización con el objetivo a mediano plazo de reducir sus emisiones de dióxido de carbono en un 20% para 2030. Este plan estará acompañado de una agenda de inversiones en proyectos y tecnologías amigables con el medio ambiente.
“La neutralidad de carbono es un objetivo que solo se puede lograr si todas las partes de la sociedad trabajan juntas. Creo que en los próximos años habrá aún más cosas que podremos hacer para mejorar nuestra huella de carbono”, dijo Máximo Vedoya, CEO de Ternium.