Las horas de inestabilidad política afectan a la evolución del mercado, que devuelve las altas ganancias generadas tras la derrota del oficialismo en las elecciones legislativas, y con atención a ayudas económicas que estimularían un mayor déficit fiscal.
“Paradójicamente, este fenómeno y la resistencia del Presidente aumenta la probabilidad de repetir el resultado del domingo en noviembre, lo cual mejora la perspectiva futura de los activos argentinos”, informan analistas de Portfolio Inversiones.
El gobierno nacional presentó el proyecto de Presupuesto 2022 con proyección de una inflación anual de 33%, el dólar a $131 y un crecimiento del Producto Bruto Interno (PBI) del 4%. Además, no contempla el pago de compromisos al Fondo Monetario Internacional (FMI) y prevé una reducción de los subsidios.
“La inversión debería crecer a niveles de 25% del PBI, mientras que la exportación debería ubicarse en niveles del 30% del PBI. Argentina es un país que se ubica muy lejos de los centros de consumo y poder”, analiza el economista Salvador Di Stéfano.
Además, agrega que Argentina “necesita un tipo de cambio alto para exportar, esto le permitirá sortear sus altos costos de flete a la hora de colocar mercadería en el exterior, potenciaría el empleo en el mercado interno, fortalecería el consumo en el país, y tendría los dólares necesarios para no pasar zozobras económicas”.
Por otro lado, el Ministerio de Economía llevará a cabo la segunda liquidación del mes, tras un buen desempeño en la primera, donde hay vencimientos por $7.000 millones para la próxima semana, a los que se suman $8.000 millones de la siguiente semana sin licitación, de acuerdo con Rosental Inversiones.
El riesgo país medido por el JP, opera estable con 1.489 puntos y no se muestra afectada por el contexto político del país.